viernes, 7 de diciembre de 2012

Acción de Gracias..


De gracia, ninguna


Estaba tan emocionada por abandonar los suburbios!
Ansiaba el bullicio de la ciudad, sirenas a las cuatro de la madrugada, peleas callejeras, caminar por las aceras repletas de gente, con la que entablar conversación, -señora! no empuje!-..aaah qué delicia!


Esos cuatro días en Atlanta iban a ser mi vía de escape, quizás podría encontrar mi paz interior, lejos de niños malcriados, que, dicho sea de paso, me estaban empezando a tocar las narices más de la cuenta.

Y es que, últimamente,  -los últimos 7 meses-, estaban insoportables.

Por eso Dean, -mi amigo.. - y yo, decidimos escaparnos estos cuatro días.

Con todo, para que yo pudiera vivir un típico "Acción de Gracias" americano, Leen, -mi buena amiga y celestina- nos invitó a cenar ese día con su família, quienes disponían de una vivienda a las afueras -nunca imaginé que las afueras fueran, cincuenta y cinco minutos away- de tal ciudad.

-Oh! tu y Dean, tenéis que venir a acompañarnos! vamos Char! no te puedes perder el pavo!

El famoso "pavo" de Acción de Gracias.

Me pasé toda la semana -de lunes a miércoles- pensando en el dichoso pavo; sí, estaba emocionada, y sí, por qué no decirlo, hambrienta, también.

Cuando por fin llegó el jueves, a las ocho de la mañana, Dean me estaba esperando en la puerta.

Cargué mi maletita, con trescientos cincuenta modelitos, -por si hacía frío, por si hacía calor, por si salíamos de fiesta, por si solo íbamos a cenar, por si había que arreglarse para la cena, por si no..- y partimos rumbo hacia Atlanta.

Una hora y media más tarde, nos entró -me entró, Dean nunca comía, yo era el machote de la relación- el hambre, y, paramos en un famoso restaurante, -que no voy a decir el nombre, porque no me pagan por publicidad- dónde a los dos nos encantaba desayunar habitualmente.

La cola llegaba hasta Luxemburgo, -¿exagerada yo?-.

-Así, a ojo, le echo tres horas con cuarenta y dos minutos y veinte segundos de espera.
Ni de broma me quedo esperando, mejor busquemos otro lugar donde llenar el buche.

-No hay problema, hay uno de éstos en cada salida, vayamos a por el siguiente.

El siguiente, se lo saltó.

-No importa, vayamos a por el próximo.

El próximo, era incluso peor, yo creo que la gente directamente esperaba, para tomar la cena.

-Holy shit! ¿regalan la comida hoy?

-Probaremos con otro.

-Ni hablar! no voy a llegar hasta San Diego en busca de un jodido **** donde el tiempo de espera sea mayor a mi paciencia !!, tengo hambre, quiero comida, y la quiero ahora !

Pobre Dean.

-¿Qué te parece si entramos en este otro restaurante? Creo que también se come
bastante bien.

-Lo que sea..-eran mis tripas las que hablaban.

Estacionamos, y nos dirigimos hacia la entrada.

Por favor que no haya que esperar, por favor que no haya que esperar..ahora era mi subconsciente el que, esperanzado, suplicaba en mi interior.

En el porche, un considerable número de personas -no obstante, en menor cantidad que los anteriores- permanecían de pie, unos impacientes, otros aprovechando para echar una calada a ese pequeño cilindro apestoso, que hace millonarias a las tabacaleras.

-Vamos a preguntar, quizás esta gente está aquí, simplemente, porque quieren tomar el aire..-ya, cuéntame otra.

Dean va en cabeza, se detiene para preguntar ,a la simpática señorita de cabellos rojizos, que se encarga de recibir a los clientes.

-Buenos días, ¿mesa para dos?

-No tenemos todavía mesas disponibles señor.

-Ya..y ¿a cuanto asciende el maldito tiempo de espera, esta vez? -estoy molesta, y mi voz no indica lo contrario.

-¿Disculpe?

-Quiere decir, que si hay mucho tiempo para esperar.

-Si quieren una mesa, el tiempo de espera es de una hora y treinta minutos, pero si no les importa tomar su comida en la barra, pueden pasar de inmediato.

-La barra! -cualquiera me detiene.

Ojeando el menú.

-Hoy quiero comer algo sano, se acabó el estar gorda!

-Fíjate Char, aquí tienen menú de dieta, e incluyen las calorías.

-¿Cuatrocientas setenta calorías por este trozo de carne!!? ¿y dice que es de dieta?? ¿estamos locos, o qué?

Ensaladas! dónde están las ensaladas!

Finalmente me decido por una ensalada oriental que incluye lechuga, zanahorias, noodles salsa de soja..y cualquier otro ingrediente que ahora no recuerdo.

Dean se decanta por un burrito vegetal con pavo, y unas patatas fritas -claro, como tu no engordas.

Me sirven un plato de ensalada, el cual podría haber alimentado a todo un ejército.

Y, otra de las -buenas, o malas, según se mire- cualidades que posee esta tierra, es que los platos que te sirven son enormes.

Personalmente me quedo con el menú del bar de Paco, -dónde digo Paco digo Pepe, typical spanish- poca cantidad y mucha variedad.

Con su ensaladita como entrante -eso sí, muy mediterránea, olivas, lechuga, cebolla y tomate, y si tienes suerte, igual le ponen hasta zanahoria y espárragos! han habido casos en los que se ha encontrado hasta huevo duro!-, su paellita o fideuá de primero,-según te apetezca-, las chuletitas de cordero, acompañadas por patatas fritas made in caseras -nada de artificial flavors-  o el típico rape a la marinera, todo esto incluyendo el postre, a elegir entre, crema catalana, yogur -el famoso danone-, fruta, helado -siempre es de nata y chocolate-, o, tarta del día -almendras, bizcocho y eso de color marrón, a lo que llaman caramelo, pero queda muy lejos de saber igual.

Y ahí discrepo, Dios bendiga los postres de América.

Los cheese cakes, carrots cakes with caramel sirope, muffins, peanut butter ice cream with vanilla and crunch....y así pudiera estar veinte capítulos más.

Así están, y así estoy yo de redondita! Y es que, cualquiera le dice que no a la camarera cuando te entrega la carta de postres y, diez minutos a continuación, te pregunta;

-¿Ha decidido ya qué postre va a tomar, señorita?

Mátame camión.

Pero esta vez, no hubo postre.

No voy a negar que no lo pensé, e incluso le dije a Dean que quería ver la carta de postres, pero, la camarera debió notar lo insatisfecha que estaba yo con mi cuerpo, -o quizás se dio cuenta de que me había desabrochado el pantalón- y nos entregó la cuenta antes de que pudiera abrir la boca.

Bien por ella.

Con el resto de la ensalada en una caja, salía yo, la mar de contenta con mi fuerza de voluntad.

-¿Has visto Dean? ¿has visto? Ni siquiera e insistido para ver la carta de postres.

-Eso es porque no te ha dado tiempo.

-La verdad es que, sigo con antojo de algo dulce..-llevaba unas barritas energéticas, de esas que tomaban los niños, con sabor a brownie, en el bolso.

-Hold on, babe.

Entramos en el coche y, reanudamos nuestro trayecto.

La ciudad nos espera, yujuu!!

Veinte minutos más tarde..

-¿Ya puedo tomarme la barrita? necesito mi postre! Si total, hoy he comido bien, ni siquiera me he terminado la ensalada, he comido muuy bien! ¿no te parece?

-Tienes que acabar con los postres, ese es tu mayor problema.

Querrás decir, ese es mi mayor problema aquí, en los Estados Unidos de América, amén.

-Está bien..esperaré;-a regañadientes, vuelvo a guardar la barrita en mi bolso.

-Hoy hace un buen día, hemos tenido suerte con el tiempo, ¿no te parece?
¿Char? ¿Chardonnay?

-Ah..¿eh?

-Que digo, que hace un día estupendo.

-Ah..si..si, estupendo.

Pero, todos mis pensamientos están inmersos en la barrita.Meto la mano en mi bolso, y la atrapo.

-¿Sabes qué? me voy a comer la mitad..eso, no me hará daño.

Dean resopla, pero me da igual, es deliciosa la sensación que invade mi boca al entrar en contacto con ella, mmm..brownie.

-De hecho, creo que me la voy a comer entera.-Me pueden más las ansias.

-Haz lo que te de la gana, pero luego, no te quejes de que estás gorda.

-Bah! si total, son solo 140 calorías!

-Ni tiene proteínas, ni tiene vitaminas, directo a las caderas!

Ahora me siento culpable.

-Y entonces, ¿por qué me has dejado comérmela? Estoy gorda!  cada días mas! y tu, no me ayudas!

De súbito, una  brusca sacudida me saca de mi absorta conversación.

-Genial! hemos pinchado!

-¿Dónde estamos? -perdona mi osadía.

-En medio de ninguna parte..

En efecto.En medio de ninguna parte.

Si abrías un poco los ojos, podías ver, -como en aquellas pelis del oeste que mi abuelo suele ver-, ese manojo de hierbas o, lo que fuera -la verdad es que nunca he sabido muy bien que es-, cruzar ante nosotros a cámara lenta.

-¿Y ahora que?

-¿Qué, de qué?

-Que, ¿qué vamos a hacer?

-Esperar..

-Esperar ¿a qué?

-¿A qué de qué? -Dios mío, dame paciencia, porque como me des fuerza le arreo un soponcio y te lo mando.

Respira hondo Char, respira hondo, así, muy bien..inspira, expira, inspira..

-Digo yo, que tendrás que cambiar la rueda, ¿no?

-¿Qué rueda? -Ay Omá! que lo mato!


-La del mechero! no te jode! ¿pues cual rueda va a ser? la del coche! so burro! qué eres un burro! -cuenta hasta diez, mantén la calma, no te sofoques..eso me pasa por quedarme sin postre.

-No tengo rueda ninguna.Habrá que esperar a que pase alguien y pedir ayuda.

-Y , ¿por qué no llamas al seguro del coche?

-¿Qué seguro?

Otra vez no, por favor..

Resulta que algo pasaba con el seguro, cuando lo sepa, os lo diré.

-Llama a la policía. -insisto, empiezo a tener hambre.

-¿A la policía? -y..esa extraña afición a repetir todo lo que yo digo, ¿a qué se debe?

Con una de mis miradas asesinas, bastó para hacerle entender.

-No puedo llamar a la policía, -desde que no puedes usar el seguro, si es que lo tienes, me doy cuenta de ello- porque resulta, que aquí, en el estado de Georgia, no puedo conducir.
Verás, es una larga historia..

Continuará..

No te pierdas el próximo episodio, ¿por qué Dean no puede conducir en el estado de Georgia? ¿Qué mal habrá hecho? ¿será un corrupto delincuente? ¿Será un asesino? O, lo que es más importante, ¿llegará a tiempo Chardonnay, de probar el pavo?

lunes, 26 de noviembre de 2012

Las Citas de Chardonnay..


"Maldito sitio web"


Aún no puedo creer como Isabel consiguió convencerme para abrir un perfil en esa página de "citas"..  "venga Char,, no podrías caer más bajo" no dejaba de repetirme a mi misma, pero ahí estaba mi foto.


Decidí hacerlo una noche cuando llegué a casa con el puntillo después de haber estado de fiesta; mi falta de sexo me estaba empezando afectar, y es que no había tenido nada parecido desde mi último encuentro con Míster M..hacía casi tres meses de ello y sí, sigo sin saber nada de él, de cualquier modo, poco importaba ya.

Me había convencido (o al menos lo había intentado) de que no iba a tener que necesitar ese tipo de medio para conseguir a un hombre,-no estaba buscando amor eterno, solo quitarme las pulgas- de la misma manera en la que me había convencido de que podría mantenerme en forma por mi cuenta sin necesidad de gastar en el gimnasio, ahora iba al más caro una media de seis veces por semana, dos horas cada día y, aún así no había rebajado ni una mísera libra.

"Puedes comer lo que quieras siempre y cuando lo quemes con ejercicio"- ese era mi lema, no aplicable en los Estados Unidos de América -amén, dónde, puedes comer lo que quieras, pero te vas a engordar, y si haces deporte, más aún.

And..isn´t it ironic?...don´t you think?

Me puse manos a la obra con mi perfil.

Subí mis mejores fotos, (una vez puestos, vamos a hacerlo bien) y en seguida empecé a recibir mensajes..pero nadie de mi agrado, demasiado alto, demasiado bajo, muy rubio, muy delgado, muy gordo, muy estúpido...lo que yo decía, ¿qué espero encontrar aquí? ¿a mi príncipe azul?

Un par captó mi atención, no porque parecieran sacados de un catálogo de Abercrombie, sino porque tampoco había mucho dónde elegir, -habló la modelo.. -cállate súper yo!.


TOM

Edad: Treinta y..                               Busca: relación estable                Nacionalidad: americana
Contextura atlética   1,78               Color de ojos: azules                     Idiomas: inglés nativo
Ocupación: Empresario                    Color de pelo: castaño claro


OBEN

Edad: veintisiete                                    Busca: pasar el rato               Nacionalidad: europea
Contextura atlética   1,82                      Color de ojos: verdes             Idiomas: inglés
Ocupación: Empresario                           Color de pelo: marrón


Empecé a alternar conversaciones con estos dos individuos..

Cuando Tom y yo, entramos en profundidad, él me cedió su fb..-o yo se lo pedí..que mas da.

-Oh no man no please no no no! dios mio no! dios mio no!- ¿este es Tom? ¿visto de cerca?

Entre ceja y pelo hay un espacio como de mil metros..como habréis adivinado, acababa de ver sus fotos, sus otras fotos...

Estaba confusa, sin duda se le veía alguien con clase y gran poder adquisitivo, pero mmm... esto, no acaba de encajar conmigo, en las primeras fotografías salía con traje, y, francamente, podría haber pasado por mi padre.

En su frente se podía jugar frontón, ahora entiendo lo de la gorra.
Luego estaban las otras fotografías, las que ya había visto en su perfil, en las cuales no estaba nada mal, pero claro ¿quién se fía?

-Porque en esta fotografía está para comérselo y en ésta otra parece un ¿viejuno ricachón?..espera un momento, mira la fecha..hace dos años de esto..seis meses atrás yo tenía cinco kilos menos así que..lo dicho, quién se fía..

Con todas, decido darle un oportunidad, no parece mal tipo y me trata bien, no es exactamente lo que yo buscaba pero quién sabe, quizás es el hombre de mi vida.
Mi imaginación se dispara:

Ya me veo en torneos de golf, cenas importantes con vestidos de "Dolce&Gabanna" y zapatos de "Manolo Blahnik", viajes por Europa..

Italia, cualquier estupenda noche de Junio de cualquier año, cena romántica para dos en el mejor hotel de Venecia.
Viaje en góndola, de pronto, a la luz de la luna, -llena, of course- él se arrodilla y, ante la atenta mirada de miles de expectantes transeúntes, saca un zafiro de diecisiete quilates, bordeado por diamantes...-Char!-..me interrumpe una vocecita en mi interior- ¿no estás corriendo demasiado? Char! vuelve! regresa a la tierra!-

Bueno..de todos modos...¿Italia?..no me convence demasiado..

Tampoco me gusta tentar al destino así que..

"Rebeka Ferrero"

-edad: 26 años                            -profesión: modelo       -1,65 m de altura
-origen : Colombiano e italiano    -cabello marrón            -contextura atlética.
-busca una relación estable        -ojos verdes

Os presento  Rebeka Ferrero, mi nuevo perfil.
Por supuesto puse la fotografía de una modelo que encontré por el google, guapísima, por cierto.

Morena, pelo ondulado, ojos verdes, sonrisa profident.

Empezaron a llover los mensajes, en menos de media hora ya tenía casi cien, más de lo que yo podía contar en dos semanas, ay que ver lo que hace una bonita cara y un par de razones.

Lo que confirma lo que todas sospechamos -y tememos- y, ellos se empeñan en negar, chicas, el físico importa, y mucho, lo demás está de más..

Cuando creé  a Rebeka, hice todo lo posible por parecer que ésta tuviera pocas luces.

-"Mi pasatiempo preferido es leer el Vogue"

-"Soy fan a tope de Selena Gómez y Justin Biebber, los amo forever"


Qué chica con 26 años  comparte éstas aficiones..muy tonta tiene que ser, ahh pero era guapa! y es todo lo que a los chicos parecía importarles.

Entré en el perfil de ambos, y, esperé a que hubieran visto la visita de Rebeka e iniciaran contacto con ella.

Esperaba que Oben se abalanzara sobre Rebeka en menos de lo que canta un gallo, albergaba en cambio, grandes esperanzas respecto a Tom, ya que éste parecía más formal.

El primero en caer no tardó ni un día:

"Hola, ¿cómo va todo? bonita fotografía, eres muy guapa "-

"Gracias, todo bien. cómo estás tu?"-

"Muy bien, oh! vaya! ¿modelo? impresionante.."

No quise perder el tiempo sí que fuí directa al grano.

"Has tenido muchas citas en ésta página?"-

"No, lo cierto es que ninguna, por ahora"- claro, lo mismo me dijo a mi.

"Vaya, ¿no te ha gustado ninguna chica de por aquí?"- quise insistir..

"No, realmente ninguna, estaba esperando encontrar a alguien como tú" -¿oh, de veras? eso no es lo que decías en tus mensajes, cerdo cabrón..

Confirmado, mentiroso a la vista, fuera de la lista.

Ahora tenía que deshacerme de él..pero no podía confesar que Rebeka era yo, o hubiera parecido un loca.

Le mandé un mensaje de texto:

"Ey, ya veo que conoces a mi amiga Rebeka, seguro que está encantada de tener una cita contigo ;) "

"Qué? no sabía que erais amigas?" -pobre, se debió quedar a cuadros.

Por su parte Rebeka también me mencionó a mi.

"Oh, ¿conoces a Chardonnay? por que es amiga mía, y según ella tenéis pendiente una cita "-

Me ahorraré el resto, fueron muchos mensajes por su parte rogándome -si, si, rogándome- que le perdonara, que el no solía ser así, que si había sido todo un malentendido, que no sabía que éramos amigas..bla bla - de eso se trata, capullo, hecha la ley, hecha la trampa.

Con uno fuera de terreno,, ya sólo quedaba otra posibilidad..



pd: Os agradecería mucho, que me dejaseis un comentario -a continuación, si miras un poco+ abajo verás la opción ;) - si os gusta el blog -o si no-, al menos para saber que no alguien me está leyendo ^^.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Aquellos maravillosos conciertos..




Cuando vine a Charlotte, se me hacía la boca agua al pensar en todos esos conciertos a los que iba a asistir, conciertos de la talla de ColdPlay, The Off Spring, o, The Foo Figthers, entre otros.

Era genial poder convivir con una familia que compartiera mis mismos gustos musicales, los anteriormente citados, sumándole ahora a Nirvana, Aerosmith, U2, y, si sigo, no acabo.

Por eso cuando me dijeron que Cold Play, actuaría en Abril, en la ciudad dónde me hallaba, no daba crédito a mi suerte, pues era, sin lugar a dudas, una de mis mejores preferencias.

Se acercaba la fecha , apenas quedaba un mes para la esperada llegada de Cold Play.
Aún no había comprado las entradas, ni había hablado con nadie, para acudir a tal esperado evento.

Era lunes, y estaba organizando los platos en la cocina, cuando mi jefa se acercó y empezamos una entretenida conversación sobre música.

-Veo, que prácticamente tenemos los mismos gustos musicales, ¿cuál dirías que es tu grupo preferido?

-Cold Play, entre otros, es el que más destacaría.

-Oh, de veras! el mio también! sabes que vienen a Charlotte el próximo mes, ¿verdad?

-Eso he oído...

-Sí, pero por desgracia no vas a poder ir, tenemos las entradas reservadas desde hace más de dos meses, así que te necesitamos para que te quedes con los niños esa noche, lo siento, otra vez será.

-Ah, bueno..no importa.- ¿queee??

-Ya te lo contaremos! - gracias, todo un detalle por tu parte.

Lo encajé lo mejor que pude, con serenidad y calma...-cuenta hasta diez, respira hondo,un dos tres, un dos tres..

Más adelante entré en cólera cuando leí por ahí que muy pronto, Cold play incluiría en su gira,España.

Hubiera sido perfecto, de no hallarme en diferente continente.
Maldita mi suerte!

Fue por el mes de Junio, cuando me enteré de que Foo figthers, daba un concierto en el mismo recinto donde había actuado Cold Play, en apenas veinte días.

Y fue dos días más tarde cuando me enteré, de que tampoco a éste, podría asistir, pues era el segundo mejor grupo preferido por mi jefe -por supuesto, de la mano de Cold play.

Que alegría, que alboroto tenemos un perro piloto!

Llevaba cinco meses en aquel, magnífico, país de la industria musical, y no había podido acudir ni a un solo concierto.

Los días iban pasando y ya había olvidado el incidente con Cold Play y Foo figthers, cuando Paula, mi amiga brasileña me preguntó si quería acompañarla al "Weenie Roast music festival", que tendría lugar en Septiembre, aquí, en Charlotte, donde actuarían Garbage y The Off spring, entre otros.
-
The Off spring! si! claro que quiero ir! espera..dime la fecha exacta.

-Dieciséis de Septiembre, es un domingo.

-Me encantaría ir! normalmente no trabajo los domingos así que esta vez seguro que sí, pero, déjame que pregunte a mis jefes, no vaya a ser que..

Estaba convencida de que esta vez si podría acudir, hasta la fecha, nunca había trabajado un domingo, y no contaba con que ésta, fuera la excepción.

Así, con todo, quería asegurarme antes de comprar la entrada y perder el dinero;
y, menos mal que me aseguré.

Le envié un e-mail a mi jefa, declarando que me hacía ilusión ir al festival, más que nada por ver a The Off spring.

A ellos les hacía ilusión ver a Garbage.

Os dejaré el enlace, para que lo podáis disfrutar, como yo hice, desde el sofá.

http://www.examiner.com/article/concert-photos-weenie-roast-music-festival-returns-to-charlotte

No, otra vez no..-Sí, esta vez, también.

De alguna manera, trataba de consolarme.

No te preocupes Char, ya vendrán más conciertos, seguro que antes de que acabe el año, acudes al alguno.

Y acudí..

El pasado mes de Octubre, sucedía, el festival latino, dónde actuaría, Jarabe de Palo.
Nunca me he considerado una fanática de Jarabe de Palo..ni fu, ni fa.

No obstante, estaba tan frustrada por tales pérdidas, que necesitaba satisfacer mis necesidades, musicalmente hablando.

Así que si tendría que ser viendo a mis con-patriotas, así sería, pero yo, americana-de-prestado-por-el-momento, no me quedaría sin mi concierto, he dicho!

Esta vez tuve suerte, pues mis jefes, ni siquiera habían oído hablar de tal festival -gracias señor.

Pese a su mala reputación en el directo, Pau Donés y su banda, no estuvieron nada mal,  y yo me sentí un poquito más cerca de España, aquel día.

El próximo concierto que se acercaba, era el de la gran diva de todos los tiempo, la gran Madonna.

Todo el mundo hablaba de tal acontecimiento,y, a mi francamente, me traía sin cuidado.
No es que no me guste Madonna, ni me gusta, ni me disgusta, sencillamente, no me llama la atención, nunca me la ha llamado.

Y menos aún, si para costearme la entrada, me toca vender un riñón.
Solo para que te hagas una idea, las entradas de "bajo-precio" rondaban los trescientos $.

Por eso, cuando mis jefes me dieron el horario para la próxima semana,  -"Jueves: de 4 a 1 a.m ; por que vamos al concierto de Madonna"-, ni me importó, y mucho menos, me extrañó.

Hoy recuerdo con anhelo, aquellos maravillosos conciertos..a los que nunca acudí.

Pero que, -gracias a las referencias dadas por mis jefes-, puedo decir que fueron grandes acontecimientos, de la mano de grandes artistas.

Y yo, a estas alturas de la misa, a Dios pongo por testigo, de que jamás, me perderé otro concierto de Cold play.

                            Aquí, Jarabe de palo en el "festival latino-Charlotte 2012"

domingo, 18 de noviembre de 2012

Un año y diez meses atrás..


Ya no aguantaba más, pero ¿quién se cree que soy?



Trabajaba como recepcionista en un importante hotel de la zona; para mi desgracia, mi compañero y yo, eramos totalmente incompatibles.


Por supuesto, como grandes profesionales que éramos, nada era visible antes los ojos de los demás, y, mucho menos, de los clientes.

Nuestra relación, se disfrazaba de falsa  amistad, y, a la luz de todos, Esteban y yo, eramos los grandes compañeros.
Todos sentían envidia respecto a nuestra relación, compañerismo y cordialidad, era nuestra definición.

Ay, si ellos hubieran sabido.
Conocéis a esa clase de personas aduladoras, encantadora, tremendamente..falsas!
Que levante la mano, quien no se haya encontrado nunca con alguien así, -ya me parecía a mi.
Esteban venía de Andalucía, por lo que desde un principio, me ofrecí a llevármelo de cañas y a enseñarle la ciudad.

Nuestras salidas cada vez eran más continuas, hasta convertirse en un ritual.
Todos los sábados después después de acabar el turno, colgábamos la americana y salíamos dispuestos a pasarlo en grande.

No penséis mal.

No era ningún secreto la condición sexual de Esteban.
Él, siempre estaba haciendo bromas al respecto.

Todos estábamos encantados.
Le presenté a mi novio, y éstos hicieron muy buenas migas.
De vez en cuando, se nos sumaba algún compañero de la recepción.

Yo estaba encantada con esta nueva amistad, y el buen rollito que había en el trabajo.

Además, en dos semanas tendría mis quince días de vacaciones, y ya tenía los billetes reservados para irme a Punta Cana con mi novio.

Era viernes, y teníamos el turno de mañana, cuando le pregunté a Esteban qué planes tenía para el fin de semana.

Me dijo que no se encontraba demasiado bien, y que prefería quedarse en la habitación descansando, -el hotel, le había cedido una de las bohardillas para vivir temporalmente, acompañado de una pensión completa.
No pregunté.

De camino a casa, hice una parada en el videoclub, compré un par de paquetes de palomitas, y alquile dos películas, 
"La vida es bella" y, "El silencio de los corderos".
Cuandro entré por la puerta, Pluto, mi perro, vino a recibirme.

Me encontré una nota en la mesa del recibidor;

"Char, he salido con mis amigos a tomar unas cervezas, no me esperes levantada que la noche va para largo, mañana te lo compenso Te quiero, Carlos."

No os voy a mentir, me dio rabia. Pero, estaba cansada de discutir.

Lo primero que hice fue quitarme los tediosos tacones, que me estaban matando, deshacerme de las medias y el uniforme, y ponerme el pijama.Así, sí. 

Una vez cómoda.

Me dirigí hacia la cocina y me serví una copa de Tinto Reserva, Marqués de Cáceres.
Abrí el microondas y coloqué las palomitas.
Alargué un brazo para coger la bolsa del videoclub y sacar los dos dvd´s.

-¿Qué te apetece ver primero, Pluto? ¿La vida es bella, o,el silencio de los corderos?

Optamos por la segunda opción, abrí la carátula, extraje su contenido,y, lo introduje en el dvd.
Cogí el vino y las palomitas, y me acomodé en el sofá, Pluto se posó sobre mis pies.
Con el mando en la mano, le di al "play".

Esperé a que el vídeo se cargara..y esperé..esperé, y volví a esperar..

Nada.No funcionaba.
Probé con "la vida es bella".
Tampoco.

-Este maldito dvd..! -hoy no es nuestro día de suerte.

Empecé a hacer zapping, nada por aquí, nada por allá..
Que asco de televisión.

Mis únicas opciones eran, la novela chorra de la sexta, los nunca-repetidos capítulos de los simpson, en antena 3, Sálvame, Sálvame deluxe, La Nória, Granjero busca esposa..no, no no y no, gracias.
Apagué la televisión.

Viernes por la noche, sola en casa, que aburrimiento, ¿qué podía hacer?
Le envié un mensaje a Esteban;

-Hola, ¿cómo estás? ¿te encuentras mejor?
A lo que no obtuve respuesta.

Treinta minutos más tarde seguía sin obtener respuesta de Esteban, así que decidí darle una sorpresa.

Todavía no son ni las diez, de un viernes noche, no creo que Esteban esté durmiendo.

Cogí los dvd´s. Me incorporé y entré en mi habitación.
Abrí el armario y cogí el primer chándal que pude encontrar.

De camino hacia el hotel, paré en la gasolinera y compré una bolsa de patatas Ruffles jamón jamón, un paquete de donuts de chocolate, una botella de Smirnoff y un par de latas de Fanta de limón.

Cargada de bolsas entré en el hotel.

En mi camino, se cruzó Sonia, una campañera con la que nunca coincidía por cuestión de turnos.

-Ey Char! ¿qué estás haciendo por aquí? creía que tu turno acababa a las tres.

-Así es, he venido a ver a Esteban, que hoy estaba pachuchillo, el pobre, ¿le has visto por aquí?

-Hace un par de horas salía del comedor, supongo que debe estar en su habitación.

Me despedí de Sonia y proseguí mi camino.

Cuando me hallé de la habitación de Esteban, golpeé con mis nudillos contra la puerta.
Nadie abrió.
Así que volví a golpear.Nada.

De dentro provenían unos extraños sonidos, debe de estar viendo la televisión con el volumen a tope, ay! éste Esteban..
Me acordé de que tenía una copia de la tarjeta que abría la puerta, así que, ni corta ni perezosa, la introduje en la ranura de apertura.

Muerta.Me quede muerta.

Sentado en el borde dela cama estaba Esteban, desnudo.
Arrodillado frente a el, Mario, el director del hotel.

Continuara..

Porque, todo tiene principio..

El viaje


Desde el avión, todo parecía confuso; dios mío, ¿qué estoy haciendo?
Una mezcla de sentimientos se apoderaron de  mi mente, y, una lagrimilla resbalaba por mi mejilla, de repente eran 2, 3,6..hasta que un océano inundó mi cara,-menos mal que no tenía compañero de vuelo.
Fuera estaba muy oscuro, y, aunque el viaje no duraba apenas dos horas y treinta minutos, hubiera deseado que aquel avión no aterrizara nunca; tenía miedo, mucho miedo, a lo que me esperaba..


En mi reproductor sonaban canciones melancólicas, que me hacían pensar en todo lo que dejaba atrás, todo lo que iba a echar de menos.
Otras veces, en cambio, sonaban canciones más dinámicas, y me sorprendía a mi misma con una positiva visión hacia el futuro, -todo va a ir bien, todo-va-a-ir-bien, fuerza mental,¿por qué no?

Entonces volvía a sonar esa canción, nuestra canción.
No me apetecía ponerme peor de lo que ya estaba, -next, siguiente canción.

Y volvía a reproducirse la "canción visionaria" , que me recordaba por qué estaba allí, y la verdadera historia sobre "Él" y "Yo".

Es increíble como la música puede hacer viajar tu mente, desplazarte hacia momentos y lugares que ni siquiera existen, tan solo, en tu imaginación.

Suelo usar esa técnica para evadirme.
Mi mente desconecta, y, empieza a crear su propia historia.

Cuanto menos, es surrealista, y la caída puede ser fatal.
Prueba a construir tu propio mundo, y cada vez estarás más decepcionado con la realidad.

Volviendo al presente; ahí estaba yo con una mano en el corazón, y con la otra, sosteniendo un kleenex.

Quién me conozca, puede pensar que estaba huyendo, quizás tengan razón.

Pero nadie conoce la verdad.

La verdadera historia, lo que me llevó hasta aquí..

sábado, 17 de noviembre de 2012

La Cita a ciegas..



Junio, 2012



Aún no puedo creer como Isabel, consiguió convencerme para acordar una "cita-a-ciegas", con un amigo de su novio-marido.
Se llamaba -se llama, supongo que sigue vivo-, Justin, y era uno de los mejores amigos de Tim, eso era todo sabía de él.


Me había negado en profundidad a salir con alguien a quien no conocía, pero eran  ya muchos meses a pan y agua, sumándole la insistencia de Isabel, acabé por ceder.

Tim le facilitó mi número de teléfono, junto con una fotografía mía.

Por supuesto, yo también exigí una fotografía del susodicho.

Castaño, aparentemente con cuerpo atlético, ojos azules...bueno, no pinta mal.

No dejaba de enviarme mensajes a todas horas, (cuando digo a todas horas quiero decir cada cinco minutos) para ver que hacía.

Me llamaba, no dejaba de repetirme lo "cute" que yo era, que tenía muchas ganas de conocerme bla bla bla..

No muy convencida, acordamos un encuentro el viernes por la noche.

Que sea lo que dios quiera.

Viernes 7:00 pm

Habíamos quedado en un restaurante de sushi, que, yo había elegido frente a su indecisión.

-Dónde estás? ya estoy aquí-

-En camino-

-Te espero en el Silver Malibú escuchando buena música-

-No conozco ese sitio, que és, ¿un bar de copas?-

-Estoy dentro, llevo una camiseta blanca que dice Fitness Sport"- ¿de veras? ¿para la primera cita..? ¿Fitness Sport..?-

Pasan cinco minutos pero a él, le debió parecer más tiempo porque me volvió a llamar;

-¿Dónde estás?

-Ya te lo he dicho, llegando, te llamo en cuanto llegue,- no estaba empezando con buen pie.

-Estoy en el Silver Malibú.

-Que si, que ya me lo has dicho, pero no sé dónde está ese sitio.

Caminando hacia el restaurante donde habíamos quedado, él, ya estaba esperándome en la puerta, efectivamente con su camiseta blanca fitness-sport, seguramente regalada del gimnasio.

El tipo no me parece feo, no es como yo lo imaginaba (nunca son como nos los imaginamos) pero no es feo, y tiene buen cuerpo.

Nos presentamos;

-Justin, pero puedes llamarme Justino, mi compañero de trabajo es mexicano y me llama Justino, es la versión española de Justin, -yo juraría que es Justiciano, pero si a ti te hace ilusión llamarte Justino..

-Si no te importa, preferiría llamarte Justin.

El tipo está nervioso, no deja de repetir.. "You´re so cute".. -ya, ya...

Pedimos, yo ya sé lo que quiero porque conozco el restaurante, a el le cuesta un poco decidirse..

Sacan los platos, y,  empieza a comer con el tenedor ayudándose de la mano..hace falta decir que era comida japonesa, le pregunto si no sabe usar los palillos.

No sabe, me doy cuenta cuando los parte por la mitad para separarlos y se cree que los ha roto.

Justino habla torpemente y de vez en cuando le gusta hablar de sí mismo en tercera persona.

Llega el momento más temido -personalmente una de las cosas que más me aterra es cuando el camarero saca la cuenta (¿separada o conjunta?) porque vamos a ver, ¿quién paga? ¿se supone que el? pero los tiempos han cambiado y no me gusta que me vayan invitando..aunque nunca se ha visto que pague la mujer..entonces, ¿cada uno paga lo suyo?- la idea tampoco parece entusiasmarle a Justino, porque nos quedamos como diez minutos esperando..aún no sé el qué, finalmente le digo que va siendo hora de pedir la cuenta;

el camarero la puso conjunta, me apresuro a decir que yo pago por lo mío, esperando una reacción diferente el tipo contesta "Ok".. -vale, no insistas por favor...todo un caballero-.

Salimos del restaurante y nos detenemos en su coche; un Malibú de color plateado -de ahí Sylver Malibú, muy inteligente Char, -la cita todavía no ha terminado, nos vamos al cine.

Tú en tu coche y yo en el mío, le digo que me siga, que el sitio está a cuatro minutos, me pregunta si debe pagarme la entrada del cine ¿?¿? - ¿en serio me estás preguntando eso? - le digo que no se preocupe que yo acarreo con lo mío.

Entramos en la sala y mientras esperamos a que la película empiece aprovechamos para hablar, el tipo es un poco extraño, repite las cosas demasiadas veces y habla arrastrando las palabras, dice que mi inglés es 100% americano..me pregunto cómo será el suyo.

Sí, un poco rarito este Justino, -debe de ser porque es americano- ¿ cuantos americanos has estado tu? -con ninguno,- pues ya está, a callar- qué pesado es mi súper yo! -así que lo acumulo en el baúl de los recuerdos junto con lo de no saber comer sushi y no ofrecerse a pagar la cena -que no es lo mismo pagar, que ofrecerse..-no le doy importancia- ¿tan desesperada estoy?.-no vamos a contestar, todos sabemos la respuesta.

Empieza la película, al menos, tengo al gran Johnny Deep, en pantalla.

Justino ni me tocó..mejor así.

El tipo empieza a bostezar, no me importa, pero tampoco me hubiera importado que hubiese puesto su mano delante de la boca cuando lo hacía, lo añado al baúl de los recuerdos.

La película termina, salimos del cine y nos detenemos en su coche para despedirnos.

Me pregunta cómo lo he pasado, alegando lo bien que lo ha pasado él.

Bueno, no estuvo mal del todo, -aún queda espacio en el baúl de los recuerdos- al fin y al cabo estaba nervioso, así que acepto una segunda cita -no dirán que no pongo de mi parte-.

Quedamos para jugar a tenis el Domingo.

Cuando estoy en el coche de vuelta a casa mi teléfono no deja de sonar, como no le contesto -perdona por no querer sufrir un accidente mientras conduzco- me llama, lo cojo -"si, nos vemos el domingo, ala, buenas noches.." -joder con Justino.. !

No puedo imaginar como debió ser aquella vez que pasó de una chica porque le agobiaba -¿de verdad? ¿ella a ti?-

Porque no os lo he contado antes pero yo era la número cinco -la quinta cita que tenía con una chica en el mismo mes, nunca me ha gustado el número cinco.

Según él, cuando apareció la número uno pesaba como cien libras más que en las fotografías -vale, no sé el peso exacto, pero para que te hagas una idea..a lo mejor exagerada- y no le estuvo prestando atención durante la cena, estaba demasiado ocupada con su teléfono móvil, así que cuando llegó la cuenta él dijo -y cito literalmente- "cada uno paga lo suyo"..-¿en serio? cuesta imaginarlo..

Además se enfadó porque él no le abrió la puerta y porque no ordenó su comida primero..cuando me lo contó me pareció absurdo pero ahora empiezo a entender..y puede ser que fuera por unas cuantas cosas más..

La número dos no paraba de escribirle a todas horas y el pobrecito, se agobió ,"pero tu siempre me estás escribiendo" -no te creas que me lo callé.

-si, pero porque antes tenía mucho trabajo y no tenía tiempo de contestarle pero ahora es diferente".. -aah, menuda suerte la mía-.

La número tres no había a olvidado a su ex-pareja..-y, ¿no sería una excusa?-.
Como sea que fuera el domingo iba a volver a encontrarme con el y así podría verificar si es que estaba nervioso -otorgemosle el don de la duda- o es que no había nada que hacer.

Domingo, 3.00 pm

Llego al sitio y Justino ya me estaba esperando -lo de puntual, lo tiene..-

Lo examino, zapatillas viejas y sucias, pantalones azules lisos y camiseta blanca lisa,  raqueta del año de la mari castaña..me explica que es de su padre..-ya, seguramente de la segunda guerra mundial.

Empezamos a jugar, yo no soy precisamente un as en tenis, pero imaginaos como debía de ser él si era peor que yo..bueno,no importa..no vamos a añadir eso al baúl de los recuerdos, si el tipo no sabe jugar a tenis tampoco es el fin del mundo.

Me giro a recoger una pelota y escucho lo que me parece un erupto, un profundo erupto seguramente provinente de la boca de un ogro..será cerdo!

Hago como que lo ignoro, pero, no sé muy bien como poner esa cara..sonrío.. -dientes, dientes, que es lo que les jode, qué grande la Pantoja!.

Al cuarto erupto le tuve que decir que no hiciera eso..-¿creéis que me hizo caso?-

Cada vez que escupía eran 200 puntos menos, ya no podía añadir nada al baúl de los recuerdos, que estaba a rebosar.

Rústico, llamémosle rústico por no decir otra cosa, rústico, rural...

Nunca más volví a verle.


P.d: esta historia es ficticia y, cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.

La policía me busca..2ªparte

Sábado 4 de Agosto, del verano más aburrido de mi vida


Maquillada y arreglada, lista para salir, solo con una pequeña diferencia, no voy a ir a ninguna parte.
Con una botella de Malbec abierta y devorando cuatro fresas..vivan los sábados por la noche en Charlotte.

Vivan mis vacaciones y viva América.



Isabel  y sus problemas.

Estoy harta de presenciar amargas historias de amor.

No cambié de continente para seguir torturándome ni con mis propias historias, y, mucho menos con las de los demás.

Se casó por...¿amor?

Isabel conoció a su "marido-novio" a través de una página web.
Se supone que se enamoraron.

Ya desde el principio no fue una relación muy,como diría yo, consolidada tal vez.
Tras varias discusiones, ella volvió a Panamá.

Una vez allí decidió que estaba enamorada.Regresó a Estados Unidos.

Su marido-novio le pidió que se casara con ella -supongo que por cuestión de papeles, y, digo yo, algo de amor habría-.

Fue una cosa rápida, una firma aquí, una firma allá, yo os declaro marido y mujer.

Se fueron a vivir a un barrio tercermundista, en una casa destartalada -lo sé, porque he estado allí- y hasta aquí puedo contar.

Ella trabajaba como niñera -al no tener todavía la ciudadanía americana, otra cosa no podía hacer- él trabajaba en un supermercado.

Él de aspecto desaliñado y vulgar, alto, rapado, descuidado y nada atractivo.
Ella, estatura mediana, rubia de pelo largo, pálida, ojos grandes y marrones

Sus discusiones eran cada vez más constantes.

Hacía apenas tres meses que la conocía, había sido la primera persona en contactar conmigo a través del teléfono, pero siempre que planeábamos vernos, salía con alguna excusa y lo cancelaba.

Isabel y su marido-novio peleaban constantemente, pero ese fin de semana la cosa se fue de madre.

Era jueves cuando me despertó un mensaje de texto a las seis y media de la mañana;

-Chardonnay, por favor ven a buscarme, Tim está super agresivo y tengo miedo, ven a buscarme por favor- si claro, en eso estaba pensando yo ahora, Tim podría ser muchas cosas, pero no constaba la violencia en sus antecedentes penales, en su defecto, Isabel era muy de adornar las cosa según su conveniencia .

Apagué el teléfono y si he leído algo o era o sueño, no me acuerdo.

Aún así mi cabeza no paró de darle vueltas al asunto y ya no pude dormir plácidamente.

Un par de horas más tarde me levanté, tomé mi desayuno, no tenía batería, así que mi teléfono seguía apagado y me fui al gimnasio.

Cuando regresé encendí el teléfono, el cual rebosaba mensajes de texto de Isabel, la llamé.

Me dijo que la pasara a recoger que tenía que ir al banco porque pensaba sacarle todo el dinero que tenían en la cuenta bancaria conjunta-.

Esta muchacha, ¿se piensa que soy su taxista?

-Lo siento, yo también tengo cosas que hacer, no puedo dejarlo todo e ir corriendo a buscarte-.

-Bueno me cogeré un taxi y voy para tu casa.

Así quedamos.

Tres horas y veinte minutos más tarde, Isabel se plantaba en mi casa con trescientas maletas.

-Chardonnay, necesito ir al banco, y necesito ir ahora mismo, antes de que me cierren, tengo que sacarle toda la pasta a ese hijo de puta.

-¿De cuánto dinero estamos hablando?

-Dos mil quinientos dólares.

-Y, ¿estás segura de que vas a sacar todo el dinero?

-Le voy a dejar quinientos dólares.

-No sé, no creo que sea la mejor opción, si el dinero es de los dos, lo más justo sería repartir a partes iguales.

-Pero el se va a quedar con la casa, y con el coche.

-Entonces quédate mil quinientos y déjale mil.

-No, si lo hago lo voy a hacer bien, -pues tú verás..

Cuando Tim se enteró de que su cuenta había sido saqueada, entró en cólera, y, el teléfono de Isabel no dejó de sonar.

-¿Qué hago? no se lo voy a coger, se ponga como se ponga.

-Cógelo, te vas a quedar más tranquila.

Dos horas, quinientas mil llamadas de teléfono y cien mil mensajes de texto más tarde;

-Ay Chardonnay, voy a ponerle quinientos dólares más, vamos al banco por favor.

Me  estaba empezando a cansar.

-Si me hubieras hecho caso desde un principio..

-Ay ya sé, pero ahora ya está hecho. -Claro, como tu no conduces.

-Bueno, pues piénsatelo mejor y al banco, ya iremos mañana, - no vaya a ser que cambies de opinión.

Llegamos a mi casa, nos dimos un baño y salimos a cenar con otras dos amigas.

Al día siguiente nos levantamos pronto y fuimos al gimnasio, de las dos horas y treinta minutos que estuvimos, dos se las pasó hablando por teléfono con Tim.

-Vamos al banco Chardonnay, le tengo que poner el dinero porque va a alquilar un coche y tiene que ser para hoy.

-Un coche, ¿para qué?

-Ah, ¿que no te lo he dicho? me voy a volver con el, ya lo hemos arreglado.

Me cabreé, y mucho.

-Tú verás lo que haces pero, no me vuelvas a llamar llorando porque no te pienso coger el teléfono, y acuérdate de estas palabras "te-la-va-a-jugar", una vez le ingreses el dinero de vuelta, se va a largar y te vas a ver más sola, si cabe, y, lo que es peor, sin un duro.

No me quiso escuchar.

Tres horas, y, dos visitas al banco más tarde, Tim aparcó su coche de alquiler en la puerta de mi casa de prestado.

-Tim pregunta si puede ir al baño- Isabel me lanza una mirada furtiva.

-Claro.- ¿qué voy a decirle? -no, lo siento, en esta casa no entran perros ni capullos, quizás pudiera hacer una excepción, respecto a los perros.

De repente un tipo afeitado -deduzco que es Tim- cruza vorazmente la cocina y el salón dirigiéndose hacia el baño.

-Hola....eh..-levanto la cabeza del ordenador, pero él, ni me mira.

Tres minutos más tarde.

-Hola, perdona, era una urgencia, ¿qué tal? - ¿par-done-mua?.

Maleducado y poco higiénico, lo corroboro segundos más tarde cuando me encuentro la tapa del baño levantada y la toalla sobre el lava-manos.

Ordinario, vulgar y maleducado, la joya de la corona, enhorabuena Isabel! tu si que tienes ojo!.

Era viernes noche, y, por supuesto el plan previsto respecto a nuestra salida nocturna, se había ido al traste con la reaparición de Tim, pues, obviamente, al "arreglarse las cosas" , la parejita quería disfrutar de una velada..romántica.

-Oh, esto..lo siento Char, pero esta noche me quedo con Tim, pero te prometo que mañana salimos, ¿si?

Sábado por la noche..

Como decía, arreglada y maquillada... había quedado con Isabel, para salir de copas y relajarnos un poco, -el fin de semana era mi única vía de escape, y ya había gozado de un estupendo y solitario viernes, sin nada que hacer.

Habíamos quedado en encontrarnos sobre 10,30 en una zona que quedaba a treinta minutos de mi casa.

10,00 p.m.

Suena mi teléfono.

-¿Char?

-Sí, ¿estás en camino?

-No, no te lo vas a creer..- un mar de lágrimas al otro lado del teléfono.

-¿A ver, qué sucede ahora? -intuía que esa noche, tampoco iba a salir.

-Ese hijo de puta! se ha largado con el dinero!! -Sí, era Isabel, y sí, yo tenía razón, y sí, otra noche en casa.

-Bueno, relájate, te paso a buscar y nos vamos de copas, y esta noche duermes en mi casa.

-No! ¿cómo puedes pensar en salir? voy a llamar a la policía! se va a enterar ese cabrón!!

-Y, ¿qué vas a decirle a la policía? ¿Ese hijo de su madre, se ha llevado todo el dinero, que le pertenecía, y que yo le robé primero? -muy lógico.

-Le voy a poner una orden de alejamiento, -di que sí, luego nos preguntamos por qué cada vez hay más violencia de género y  por qué la policía no te toma en serio, pues ¿cómo van a hacerlo, si las órdenes de alejamiento están a la orden del día ?, ay! es que me ha dejado! pues ahora me enfado y le pongo una orden de alejamiento!, no, eso no funciona así, pues es un tema muy serio.

-¿No crees que te estás pasando?

Una vez más, no me quiso escuchar.
Y una vez más, me quedé en casa un sábado por la noche, el último fin de semana de mis vacaciones, encerrada en casa.

No quise hablar con Isabel por un tiempo, hasta que, aquella mañana, cuando descubrí que el sheriff me andaba buscando, deduje que Isabel quizás tuviera algo que ver.

Y efectivamente, la policía no me buscaba a mí, la buscaba a ella.

Al parecer, ahora era Tim quién quería ponerle una orden de alejamiento a ella y, tan simpático él, dio mi nombre y mi dirección, creyendo que ésta se hallaba en mi casa de prestado; lo cual no era cierto.

No tenía ni idea del paradero de Isabel, ni me interesaba saberlo.

Con amigas como ésta, ¿quién necesita enemigos?













La policía me busca..1ª parte


Querida Eva.


Que tristeza más absoluta.
Pasan los días cual si fueran años, espera, eso no era..¿una canción?
Whatever, éstas son mis vacaciones, aquel tiempo tan anhelado, tan esperado, tan..aburrido,tremendamente aburrido.


Me levanto, desayuno, me voy al gimnasio, vuelvo, como, me ducho, me desespero, me engancho al ordenador, me desespero, miro el facebook, escucho música, me doy una ducha, me desespero....hasta que se hace de noche, me tomo mis pastillitas de melatonina 100% natural y me acuesto, y así una y otra vez, día tras día..esto no es vida.

Quiero volver a España, siento que estoy perdiendo mis años de juventud.
Un lunes a las siete y media de la tarde bebiendo una -en realidad dos- copas de Malbec, por cierto que ya no queda, tendré que echar mano del Chardonnay.

Tengo miedo de volverme una alcohólica, ¿qué cosas te ha aportado esta experiencia? he desarrollado una extraña mutación y me he echado a la bebida. Nice.

Ah, por cierto, la policía me busca.

Era un tarde de tantas, alrededor de las siete de la tarde, cuando llamaron al timbre.
Pensando que se trataba de cualquier empleado dándose a conocer, pasé de abrir la puerta, para qué el esfuerzo de entender y encontrar las palabras adecuadas que decir cuando de lo único de lo que se trataba era de publicidad.Seguí a lo mío.

Insistieron, y yo, a lo mío.
Volvieron a insistir, vaya, ¿que pesaditos estamos eh? me empezaba a cabrear.
Otra vez, esta vez con nudillos incluidos, dios! parecía que se estuviera acabando el mundo!

Como, naturalmente, seguí sin abrir -esta vez más por miedo, que otra cosa- lo volvieron a intentar por la puerta trasera, pero yo en mis trece.
Ya se cansaran..subí las escaleras y esperé diez minutos en el baño.

Me preocupaba la berenjena que había dejado en la sartén, no fuera a ser que cuando bajara me encontrara la cocina ardiendo.

Finalmente bajé, ni rastro del insistente individuo.

Corrí hacia la berenjena, vaya! que inteligente soy, había apagado el fuego posteriormente, lo que pasa que lo había olvidado.

A la mañana siguiente tenía un mensaje de mi jefa, la mamá de la familia;

-Hola Chardonnay! ¿todo bien? hemos recibido una nota de nuestro vecino, diciéndonos que ayer el Sheriff estuvo en casa, aparentemente buscándote a ti.

-¿En serio? debía estar en la ducha porque no advertí que nadie llamara a la puerta.
No tengo ni idea de qué puede tratarse, todo esta bien aquí, no he hecho nada ilegal.

Era verdad, no había hecho nada ilegal.

Así que, ¿la policía eh? No tenía ni la menor idea de que..espera..me dejé los cubos de la basura más de dos días en la calle, y alguien los entró al patio delantero, aunque no creo que eso le importe mucho a la policía...¿qué podía ser?..a no ser....¿Isabel?..espera..no creo...¿o si?

Tengo que dejarte, te lo explico en la próxima carta;


Saludos,


Tu amiga Chardonnay, futura esposa de Hulk.

pd: sigo gorda.

ppd: necesito una buena dosis de..

pppd: urge!


viernes, 16 de noviembre de 2012

Menuda nochecita


Dos de Septiembre


Viernes noche..
Había quedado con Nawja, una amiga polaca a la que bastante aprecio le tenía.Nawja no estaba pasando por una buena época con su novio, -americano de pura cepa- no sabía si estaban o no estaban, aparentemente lo segundo, así que salía más a menudo.


Me caía bien Kevin, solo había coincidido con el en un par de ocasiones pero era suficiente como para saber que no era un mal tipo.
Esa noche decidimos salir por una zona de bares a tomar unas copas.

Nawja me comentó que una amiga americana suya nos estaba esperando en el local.
Pero no mencionó que acompañada.

De pronto me vi en una mesa con cuatro personas, la amiga de Nawja, una pareja, y una chica pelirroja que se parecía a Miranda de Sex in the city, pero con el pelo largo; todos ellos americanos.

Sentí una incómoda vibración.

Me guío por energías y conexiones y en aquella mesa ambas eran negativas.
Nos sentamos, presentamos y saludamos.Hasta ahí, todo muy cordial, bonito y maravilloso.

Nawja, empieza a hablar con su amiga y yo me quedo un poco de lado.
La chica que hay a mi derecha tampoco habla, el chico que hay sentado a su lado -por lo que se ve, su pareja- ,mantiene una entretenida conversación con -vamos a llamarla así porque desconozco su nombre real- Miranda, la pelirorja cachonda.

Me siento apartada, ridícula, diminuta.
Llega mi cerveza y la devoro con ansias, necesito mucho alcohol para tolerar esto.
Ellas lo deben de notar porque cruzan un par de palabras conmigo, así sin éxito porque enseguida vuelven a lo suyo.

Intento participar en la conversación, de verdad que lo intento, pero dónde no hay conexión no la hay.

Dios, que situación más incómoda. Ya no sé ni dónde mirar.

Me pido una segunda cerveza.
Un pensamiento me invade, ¿y si me voy? ¿estaría muy mal hacer eso?
No habría inconveniente de no ser porque esa noche Nawja se quedaba a dormir en mi casa y había dejado su coche allí, sería una putada dejarla tirada, aunque por otro lado, me sentía utilizada.

Si tenía tantas ganas de hablar con su amiga americana a la que hacía tanto que no veía, ¿qué demonios pintaba yo alli? 

Estaba decidida a largarme cuanto antes.
¿Cómo se lo decía a Nawja? no estaría bien irrumpir en medio de su conversación, y sería incómodo explicar mis razones delante de esa extraña gente a la que ni conocía.

Exactamente, no conocía de nada y me importaba un pichote -he dicho pichote?- lo que pensaran, probablemente no los volvería a ver en mi vida.

-Esto...Nawja, cariño, creo que me voy a ir.

-Char, por qué? - Nawja me miraba atónita, como si no se hubiese percatado de que yo allí sobraba-.

-Francamente no me siento a gusto -qué quieres que diga? ¿la compañía no es grata? ¿me siento sola y aburrida? ridícula? no me caen bien tus amigos? eso sería decir demasiado y no ser políticamente correcta, y había sido muy políticamente correcta, hasta la fecha-.

-Pero por qué? -deja de insistir joder, déjame ir!-.

-Puees...verás, -a ver, cómo te lo explico..- resulta verdaderamente incómodo tener que decir esto pero, -ya que lo preguntas- me siento apartada -ya está, ya lo he dicho- y además me aburro.

-Es por el lugar? luego vamos a ir a bailar un rato al bar de al lado, ¿quieres ir ahora? -

-Ya..- no es exactamente el lugar- no sé..no me encuentro a gusto, -no me tires de la lengua, no me tires de la lengua-. 

-Pero, por qué?? 

-Mira, yo entiendo que tengáis muchas cosas que contaros, pero yo podría estar haciendo cosas más interesantes un viernes por la noche que no estar aquí viendo como corre el viento. -sus caras eran todo un poema-.

-Pero estamos aquí, conversando -querrás decir que tú y tu amiguita conversáis- y tomando unas cervezas.

-Bueno, esto..es que casi que me voy a ir con un grupo de amigos que están en otro lugar.

-Y qué pasa con mis cosas? ¿ Y cómo vuelvo a casa? -pues hija búscate la vida-.

-No sé..yo si quieres te dejo en mi casa y coges tu coche.

-No te preocupes, te puedes quedar a dormir en mi casa y mañana te llevo yo a recoger tu coche -la amiga americana-sabionda había hablado-.

-Oh Char, eres como Michaela -

Michaela solía ser la mejor amiga de Nawja hasta que, según ella, discutieron porque la chica en cuestión no era sociable, -y a Nawja le gusta adaptarse a la sociedad Estado unidense-.

En su momento le había dado la razón, hay que ser sociable, pero ahora podía entender perfectamente a Michaela.

No se trataba de ser sociable, se trataba de salir con una amiga que apenas te prestaba atención.

Hubiera sido lo mismo salir con un paraguas. Pobre Michaela.

Ya había salido con Nawja un par de veces y en todas había ocurrido lo mismo, pero siempre encontraba algo con qué justificarlo; es que había bebido mucho, es que vino con su novio..
No obstante, no me gustaba que me hubiera comparado con Michaela -a la que ni siquiera conocía- así que pensé que iba a darle una oportunidad a la noche, si hay algo que no soy es anti-social, y cedí a quedarme.

Maldita la hora.

Hora de cambiar de lugar.

La pareja nos abandonó -dichosos ellos- y Miranda, Nawja, su amiga la americana-sabionda  y yo, nos  fuimos a un bar dónde solíamos ir a bailar algunos fines de semana.

Entramos en el club.

Miranda, -la pelirroja cachonda- se alejó de nosotras dirigiéndose hacia un jovencito que por allí se hallaba. 

Qué divertido, ahora me encuentro en medio de la pista entre Nawja y la americana-sabionda, la noche está dando de sí.

A Miranda se la ve muy acaramelada con su nuevo fichaje.

Media hora más tarde, cuando regresaba del baño, me la encontré sentada sobre el lomo de aquel jovenzuelo que se había ligado hacía una hora , y a la sabionda americana hablando con otro individuo, en la zona vip, -dos metros de ancho separados por una ridícula cinta negra y dos sofás mal puestos.

Como no vi a Nawja por ninguna parte, y el panorama no invitaba a acercarse, me dirigí hacia la salida y llamé a mi amiga -estaba empezando a dudar si amiga o conocida- por teléfono;

-Dónde estás?

-En el baño.

Ya he tenido suficiente por hoy, me voy a casa, ¿te vienes o te quedas?

-Espera que salga y nos vamos a casa.



Carta a una amiga



Querida Eva;



¿Cómo van las cosas por España? Ya me han dicho que cada día el asunto financiero echa más humo, ¿sigues con tu trabajo? no te lo tomes a mal pero, no me extrañaría nada que te hubiesen echado, no porque así lo quiera o porque piense que no estás capacitada, ni mucho menos, pero últimamente tengo más amigos en la cola del paro que en la cola del supermercado.


Por aquí todo está mejor, te he dicho que al final me voy a quedar? nada de rematch, lo he pensado mejor. ¿Por qué? pues no sabría decirte , más bien la pregunta acertada sería, ¿Por qué si? Al fin y al cabo si estoy a gusto con la familia, eso es lo importante, no vaya a ser que me toque una peor, no dicen que si no está roto, ¿no lo arregles?

Tengo un viaje pendiente, supongo que ese sería un motivo más que suficiente para quedarme; no me vendría nada mal una escapadita a España, aunque sea para ver lo mal que están las cosas por allí y regresar contenta con mi elección, ¿cruel? puede ser.


Mi peso sigue igual, quizás peor, no me quiero subir a la báscula porque no me quiero traumatizar.

Los pantalones que antes me iban grandes y luego estrechos, ahora ni siquiera me los puedo abrochar.

La cosa, se me está yendo de las manos.


Al menos el pelo me está creciendo rápido, o esa es mi impresión.


Estoy muy positiva, con energía; ya sé que no es muy común en mi, así que quiero aprovechar esta racha antes de volver a mi estado natural.


Ochenta grados al sol, muriendo lentamente mientras  espero a que el niño mediano acabe sus prácticas de fútbol, y no me estoy cagando en nada, asombroso, ¿verdad?, yo también lo creo.

Bueno querida, llegó el momento de despedirse, tu amiga que te quiere y te echa de menos.


Chardonnay,

pd: como ya ha quedado claro que no voy a adelgazar hasta que regrese a España -con suerte- y que tanto da que le de al brocoli como al chocolate, he optado por la segunda opción, a la mierda la dieta!

Rumbo hacia la playa


Sábado, 9 de Junio, 6,30 a.m. 



Mis amigas están aquí, nos ponemos en marcha e iniciamos el viaje hacia la playa, Silvana conduce, -que ganas tengo de ver el mar-.

El viaje es largo, paramos en "Waffle house" a tomar un típico breakfast americano -yo ya había tomado mis cereales pero no vamos a llevar la contraria, si hay que comer dos veces se come y chiton- pienso en algo sano..que carajo! estoy de vacaciones!..-tu verás pero luego no te quejes cuando te subas a la báscula y veas que has subido 5 libras,..-ya estamos otra vez..tu a callar!-.

Me sirven una especie de gofre redondo y grande (especialidad de la casa) al que le añado una especie de caramelo por encima, delicious! -eso eso, tu métele caña..- unos huevos así como muy cocinados -aquí le llaman "scramble eggs" pero no deja de ser un revuelto de toda la vida-, una loncha de jamón york ,como un vuelta y vuelta, y no recuerdo si dos tostadas o no..a la rica dieta!..anyway..estaba muy rico..ahora, habita en mis caderas..- te arrepientes, ¿eh? pues ya es tarde!- tedioso cargo de conciencia..


Como tres o cuatro horas más tarde llegamos a la playa, acampamos, inspeccionamos el lugar..muchos chicos jóvenes, muchos chicos fornidos y jóvenes, muchos chicos de buen ver, fornidos y jóvenes, a nuestro alrededor..y muchas chicas con cuerpos espectaculares también...- ¿cómo lo hacen?  quizás no visitan la casa Waffle muy a menudo..-.


Las cuatro nos miramos, ninguna se podría presentar a Miss nada..

Me lamento, siento un odio repentino hacia mis cinco -de momento- kilos de más -estaba rico el desayuno, ¿eh?-, atrás quedo el verano pasado, cuando no me importaba exhibirme.. - espera, he dicho ¿exhibirme?-  quería decir mostrarme, mostrarme en público con mi bikini de rayas -como Eva María- .. en aquel tiempo tenía pareja; ahora tengo cinco kilos de más..que paradoja es la vida...

Esta playa no huele a playa, no huele absolutamente a nada..-mediterráneo vs. Atlántico-.

La arena es blanca, y hace un calor que te puede coger algo.

No destaca por su extrema limpieza, no se parece al Caribe -no es que haya estado allí,  pero he visto fotos -.


Fiesta, hay mucha fiesta.


Los jóvenes de alrededor están bebiendo -no precisamente agua- y jugando a juegos extraños, como meter unos vasos de plástico en la arena para dios sabe qué, o lanzar una especie de saco en el aire, así se divierten estos yankis.


Silvana tiene ganas de juerga.


-Chardonnay! vámonos a pasear por la orilla..-si si,pasear, yo sé lo que ésta anda buscando..-


-Oh no Silvana, ¿en serio crees que tengo cuerpo como para ir enseñándolo a orillas del mar? no gracias, no este año.


-Oh venga! ¿tu crees que los chicos van a venir a ti? vamos a por ellos!! -ajá, así que es eso lo que buscas eh pillina..


No estoy por la labor, sinceramente, no voy buscando jauja, no este año.


Sin éxito alguno, Silvana se aleja por la orilla cual lobo hambriento en busca de presas.


Dos minutos más tarde, dos galantes jóvenes del grupo de al lado, se acercan para preguntar si queremos jugar, están de buen ver, pero..-no, gracias- insisten..-bueno..quizás después-..no hubo un después.

Cuando Silvana regresa de su paseo-en-busca-de-hombres, nos comenta que hay un bar plagadito de gente joven, con buen ambiente.


Nos acercamos.


Grupos de jóvenes avalanzándose hacia la barra, para pedir margaritas, mojitos, long island.


Un dj, pincha música contemporánea.


Nadie baila, es otra costumbre americana, no bailan, solo beben.


Nos sentamos en una mesa porque Lauren y Sophie están hambrientas, pero de comida.


Veinte minutos más tarde, regresamos a nuestra pequeña parcela en la arena.


Estamos empezando a ponernos gamba.

Nos queremos ir, pero Silvana se resiste, hubiera importado poco si no fuera porque conduce ella.

Hora y media más tarde le damos un ultimátum, -¿ves mi espalda? está roja, ¿eh? pues así va a quedar tu cara como no nos vayamos ya!- vale, no fue así exactamente, pero Silvana cede.

Nos vamos al hotel.

Silvana me pone nerviosa, es demasiado despistada y desastre.

Me toca compartir cama con ella..que alegría..

Todas sus cosas están esparcidas por mi lado de la cama y la habitación parece una pocilga..y, como yo no soy de callarme las cosas -no vaya a ser que me de una úlcera de estómago, y no queremos eso, ¿verdad? - se lo digo abiertamente.


-¿Ves ese lado? es TU lado de la cama, ¿ves este otro? es MI lado de la cama..¿puedes entender eso? ¿si? entonces, ¿por qué están todas tus cosas en MI lado?- ..algo así fue..


Nos damos una ducha para eliminar los restos de playa en nuestro cuerpo, tengo arena hasta en sitios que ni sabía que existían.


Mientras espero mi turno me entretengo en mi ordenador, -el hotel tiene wiffi así que es una suerte habérmelo traído-.


Silvana intenta apoderarse de él..- ¿quieres que te enseñe mis fotos de bla bla bla..bla bla..? - no quiere enseñarme sus fotos, quiere consultar su kit de supervivencia.-


- Bueno, cuando me vaya a la ducha te lo cedo pero ahora quiero acabar de leer mis mensajes, si no te importa..- le importa, porque sigue intentándolo..la ignoro.


-Tengo cuarenta mensajes sin leer.


- Yo tengo trescientos, insiste ella- .. -le damos un pin?-.


Me voy a la ducha y le cedo mi ordenador, salgo de la ducha y le pregunto, sutilmente si no piensa ducharse, -me ducharé en quince minutos- ya..-me seco el pelo, me visto, en insisto -


-Silvana, ¿no crees que va siendo hora de ducharse?-.


- Si, si, ahora, en diez minutos-.


-No Silvana, no lo has entendido, me da igual si te duchas o no, pero devuélveme mi ordenador-  de un tirón se lo arrebato de las manos, no me queda otra.


Dos horas más tarde estábamos tumbadas en la cama cuando escuchamos algo parecido al sonido que produce el vidrio al estrellarse contra el suelo.


Me dirijo de un salto hacia el baño, dónde se encuentra la nevera -curioso lugar para una nevera-.


Gracias por romper la botella de vino, Silvana..-


-Oh! I am so sorry..- 


Ya, no te preocupes, en el supermercado las hay a patadas.


Me ofrezco a acompañarla, el tiempo no escasea, y, temo, que si la dejo sola, nunca más la vuelva ver..ahora que, viéndolo de ese modo, la idea es tentadora, me lo pienso..no, la necesitamos para volver.


A mitad camino le da por ponerse a buscar la tarjeta de crédito, cree que se la ha dejado, 



Si hay algo que con el tiempo he aprendido y mejorado, es a mantener la calma, impaciente empedernida he sido siempre, pero ahora, ay! si mi madre me viera, no me reconocería.


Silvana estaba conduciendo cundo le dió por buscar su tarjeta de crédito, pacientemente -hasta yo me sorprendí, en otro tiempo le hubiera dado dos gritos, pero ahora era la nueva y mejorada Chardonnay.


-Por favor, Silvana, todavía me quedan muchas cosas por hacer en la vida, como buscar un marido rico, tener una gran boda, formar una familia, divorciarme, hacerme millonaria, arruinarme..no quiero morir aún, ¿te importaría mucho dejar de buscar la tarjeta mientras conduces? ¿que te parece si aparcas el coche en ese descampado y te pones a ello?..-..¿si? gracias!..pero mujer, no lo dejes en mitad de la carretera, ¿no ves que vienen coches de cara?? entralo un poco!...-¿es para matarla o para matarme?


Por fin llegamos en 30 minutos, lo que era un trayecto de 10, no encontró la tarjeta pero sí algunos dólares sueltos en la guantera.


Aún aparcadas en el parking del supermercado, reparé en algo..- ¿cómo vamos a abrir el vino? ¿deberíamos cambiarlo por uno de rosca? ¿tal vez, comprar un abridor?- a lo que contestó..


-no malgastes tiempo pensando en eso ahora..-.


Cuando llegamos al hotel Lauren y Sophie, seguían en la cama.


Empezamos a arreglarnos, me preparo la cena, o sea se, la pongo en el microondas.


Voy a abrir el vino..lo sabía..no es de rosca..¿cómo diantres vamos a abrir la botella, Silvana?


Todas hacen oídos sordos, se ve que nadie quiere beber.


Preguntamos en recepción, no tienen abridor de ninguna clase.


Me pongo a buscar en "google", la forma de abrir el vino sin abridor, intento varias opciones, entre ellas golpear el vino contra pared, la pared casi me la cargo pero el tapón seguía ahí..


-Dale un poquito más!, ya casi está afuera- sí, Silvana me apoyaba en su totalidad, desde la cama.


-No, Silvana, no se ha movido ni un milímetro.


Por fin, ya hasta las narices, se me ocurre, seré tonta! lo empujo hacia adentro y listo!


Vino abierto y cerveza en la mano, menos mal que tenemos a Sophie, que nos abre las cervezas con la boca.


-Porque, yo soy una chica de la calle..-gracias, Sophie, no sé que hubiéramos hecho sin ti.


Empieza la operación maquillaje, Silvana parece un payaso.


-¿Puedo ayudarte con el maquillaje?- me ofrezco -creo, que te has puesto demasiado- vale, quizás no es asunto mío pero, ¿debo dejar que salga y haga el ridículo o intentar ayudarla? 


No le hace mucha gracia, la retoco un poco, pero, milagros a Lourdes.


Por fin, arregladas -en la medida de lo posible, y, algo bebidas, salimos hacia la fiesta.


En el coche, yo ya estoy algo piripi y, derramo media cerveza sobre éste, pero no se lo digo a Silvana, sí a las demás.


Llegamos al sitio, un club bastante cool, grande, con muchos pasadizos que se comunican con otros dos clubes, la música no está mal en comparación con todo lo que ponen por ahí en estos, nuestros tiempos.


Primera parada, la barra, necesito alcoholizarme, más aún si cabe.


-Un "long island" para mí, gracias, uy que chico más majo!- soy toda risitas.


Nos ponemos a bailar, Silvana hace caras largas..


-A ver flor de loto, ¿qué te sucede ahora? ¿no estás contenta con el sitio?


Dos horas más tarde se da cuenta de que ESE es el club dónde ella quería ir, pero claro, aún no se había dado cuenta de que era el mismo en el que estábamos desde el principio.


Nos sentamos para descansar, en un banco de la parte exterior,-muy a mi pesar, yo quiero bailar!-.

Un grupo de chicos ingleses se acercan para..¿conversar? y lo que pillen..pero como no ven demasiadas posibilidades, enseguida nos abandonan en busca de carne fresca.


En unos minutos volvemos a la pista, Lauren, Sophie, y yo, nos lo estamos pasando en grande, -tal vez el vino, las cervezas y el par de long islands, haya contribuido un poco.


Unos chicos nos están rodeando todo el tiempo; ¿de qué me suenan sus caras? ah! si son los de la playa!, la verdad es que con ropa, pierden bastante.


Uno de ellos empieza a decirme no se qué, y no sé si por el idioma, o por la intensidad de la música, pero ni oigo ni entiendo, hago caso omiso.


Se vuelve, y lo intenta con Lauren, que tampoco.


Le toca el turno a Sophie, nada.


Silvana está de morros, -amiga, no soportas no ser el centro de atención eh?-.


Empieza a subir y a bajar, cual stripper se trasase..nada, que hoy no es tu noche Silvana.


Al día siguiente, antes de partir de vuelta hacia casa, paramos en un gran outlet.


Fuimos directamente hacia Tommy Hilfiguer y me volví loca.


Inmediatamente me hice con todo un equipamiento ideal para jugar a golf -como si yo jugara mucho al golf-  a mi cesta de compra agregué un polo azul marino, unos pantalones cortos beige tejido tipo gabardina, unos tenis azul marino también y un bolso grande tipo deportivo beige con las típicas rayas de Tommy azul y rojo, inconscientemente -puede que no tan inconsciente- estaba pensando en tardes de golf, ya me veía toda glamurosa golpeando la pelota.


Una vez hube acabado con Tommy, era el turno de Guess.


Me probé unos cuantos vestidos sin éxito alguno, así que me dirigí hacia los zapatos, éxito garantizado-.


Mis ojos se posaron ahora sobre unas cuñas negras, me las probé.

Cómodas eran un rato, bonitas y baratas, a la cesta!

Ya me veía en un restaurante estrenando mis zapatos nuevos de Guess.


Añadí a mi compra unos pares de pendientes.Listo.


Luego pasamos por una tienda de perfumes y no pude resistir al olor de Ralph Lauren.


-Así que,  ¿ese es el perfume de que tanto hablabas? mmm huele realmente bien.


-Si, Silvana.


-Mmmm me gusta, me gusta mucho.


-¿Te gusta? ¿te lo quieres comprar? Porque si te gusta tanto te lo cedo, pero no voy a compartir olores contigo, -empezaba a irritarme, después treinta tiendas persiguiéndome y queriéndose comprar lo mismo que yo-.


-No no, solo digo que me gusta.


-Ah, bueno..


Dios dame paciencia, porque como me des fuerza, la mato!!


Mi tarjeta de crédito sacaba humo, igual que mi cabeza.


De camino a Charlotte, en un momento dado, Silvana dió un volantazo, en el cual yo -medio dormida- me desvelé de golpe, -qué?? qué-pasa-vamos-a-morir??


Si es que no se puede conducir apoyada sobre el codo y con la pierna izquierda flexionada, ¿esto que es lo que es??, ¿campo y playa!?






Aquí una foto de una de las playas de Charlestton, Folly beach.



P.D: Por motivos obvios, de privacidad, los nombres han sido cambiados; aunque no me cabe duda de que las personas aquí nombradas, se pueden dar por aludidas fácilmente.

Podría contar muchas más cosas que Silvana hizo en aquel viaje, pero se haría demasiado largo.